Apología del alcohol (bien bebido)
Sí, alcohol; porque no voy a escribir sobre el agua, que para eso ya hay vasos.
Fijarse bien (esta semana es una buena manera de empezar un párrafo) en el título: alcohol bien bebido. ¿Y a qué me refiero con eso? Pues ni a la cantidad, ni a la manera, ni a la postura, sino al recipiente.
Para cada vino, que hay miles, hay un tipo de copa; para las cervezas, quien haya viajado por Centroeuropa posiblemente tenga en su casa una colección de jarras y vasos pertinentemente hurtados, cada uno para cada tipo; si se trata de la nuestra, vaso barrilete -como yo le llamo-, de sidra o jarrillo de lata o de barro, o directamente del botellín para quintos y tercios y para los cubatas, copa de balón o vaso ancho.
Pero vasos de tubo no, por favor, no los compren, no los usen, no nos sirvan en ellos; para nunca, para nada. Vivamos y bebamos, pero bien vividos y bien bebidos.
NO A LOS VASOS DE TUBO.
2 comentarios:
Lo mejor es beber por el culo de la botella ;-P
Lo peor de los vasos de tubo es tener que fregar 15 un domingo por la mañana. Estoy de acuerdo contigo, fuera los vasos de tubo!
Los de sidra siempre mejor :)
besos tete
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