Objetos perdidos
¿A dónde van las cosas que se extravían?
Cuando se trata de objetos, pasan a manos del afortunado que las encuentra, o bien caen por la rejilla de una alcantarilla o llegan a cualquier otro lugar inaccesible, o son barridas, baldeadas, o aspiradas.
Siempre he sido más de encontra cosas que de perderlas; lo uno por ser cuidadoso y lo otro por observador. Pero por mucho apego que se le tenga a algún bien, nunca es demasiado grave la pérdida. Y dejando a parte las personas, que por descontado siempre es doloroso, quedan las cosas intangibles.
Peter Pan perdió su sombra y yo he perdido mi tranquilidad. Solía ser una auténtica balsa de aceite, imperturbable, inamovible como una roca y ya no lo soy. A penas se percibe y si no me conoces muy bien o no te lo digo, seguro que no lo notas, pero de un tiempo a esta parte mi interior es un auténtico bullidero. Quizá porque estoy más pendiente de las cosas que me importan y sufro y paso miedo por ellas; quizá porque sigo redescubriéndome en mi camino hacia mi propia autenticidad y esto es parte de lo que me ha tocado; quizá porque -incluso yo- todo va más deprisa...
¿A dónde van las cosas que se extravían?
Cuando se trata de objetos, pasan a manos del afortunado que las encuentra, o bien caen por la rejilla de una alcantarilla o llegan a cualquier otro lugar inaccesible, o son barridas, baldeadas, o aspiradas.
Siempre he sido más de encontra cosas que de perderlas; lo uno por ser cuidadoso y lo otro por observador. Pero por mucho apego que se le tenga a algún bien, nunca es demasiado grave la pérdida. Y dejando a parte las personas, que por descontado siempre es doloroso, quedan las cosas intangibles.
Peter Pan perdió su sombra y yo he perdido mi tranquilidad. Solía ser una auténtica balsa de aceite, imperturbable, inamovible como una roca y ya no lo soy. A penas se percibe y si no me conoces muy bien o no te lo digo, seguro que no lo notas, pero de un tiempo a esta parte mi interior es un auténtico bullidero. Quizá porque estoy más pendiente de las cosas que me importan y sufro y paso miedo por ellas; quizá porque sigo redescubriéndome en mi camino hacia mi propia autenticidad y esto es parte de lo que me ha tocado; quizá porque -incluso yo- todo va más deprisa...
¿A dónde van las cosas que se extravían?
3 comentarios:
Has escuchando una canción de Silvio Rodríguez que se llama "¿A dónde van?"
Hace mucho que no la escucho, pero al leer esto me ha recordado mucho.
Reconozco que Silvio en un gran músico y mejor letrista, pero no soy muy aficionado a su música. Sí he escuchado unas pocas canciones suyas, pero de esa en particular no me acuerdo.
Interesante tu web.
Eso quisiera saber yo!!!
¿Dónde están todos esos pendientes que he perdido???
Y perder la tranquilidad no creo que sea malo algunos lo llaman madurez...
Cerillos currantes para un "vacacionero"
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