Irreversible

Una de las mejores cosas que tienen los amigos es que te conocen y ese hecho termina por ser ventajoso. Por ejemplo a la hora de recomendarte películas. Anoche encontré el hueco y la ví, mientras los demás dormían y con la habitación a oscuras; situación inmejorable.

Antes de comentar algunas cosas sobre la película voy a adelantar que no la recomiendo. Y no es porque me gustase o no, sino porque es una película difícil y no sé quién estará delante de estas letras, por lo que no me quiero responsabilizar de nada.

La película no destaca por la historia que cuenta, sino por el montaje. Desde que Tarantino revolvió las escenas de Pulp Fiction hemos visto montones de variantes de cómo despistar al espectador. En ésta que tenemos entre manos enseguida le coge uno el hilo a la cosa. No es de extrañar que el director sea el responsable del montaje de la cinta, porque eso es lo más destacado de la película.

El sonido, la steady cam y la iluminación crean una atmósfera que llega a aturdir por momentos. Y las interpretaciones acompañan, aunque no son papeles especialmente meritorios.

Es una película que no deja indiferente, ingeniosa y vistosa, pero a la vez muy sórdida, con mucha violencia de todo tipo como para hacerla apta para la mayoría.